Inicia el Censo de Salud y Bienestar sobre las personas adultas mayores

Inicia el Censo de Salud y Bienestar sobre las personas adultas mayores

 

  • Se efectuará casa por casa y se conocerán datos personales, estados de salud, tratamientos médicos, uso de medicamentos, vivienda, educación, ocupación laboral, movilidades, discapacidades, ingresos económicos, vínculos familiares y los entretenimientos

 

Foto: T E

 

Susana SÁNCHEZ.- El gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció en su conferencia mañanera del lunes 7 de octubre que  a partir de este mes y en los siguientes dos meses se llevará a cabo un Censo de Salud y Bienestar a 13 millones 600 mil personas mayores de más de 65 años para conocer sus estados de salud y  condiciones de vida.

 

La secretaría de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, explicó que por este Censo se conocerán datos personales, estados de salud, tratamientos médicos, uso de medicamentos, vivienda, educación, ocupación laboral, movilidades, discapacidades, ingresos económicos, vínculos familiares y los entretenimientos.

 

El levantamiento de estos datos se efectuarán casa por casa y las llevarán a cabo los trabajadores conocidos como servidores de la nación para posteriormente en 2025 un ejército de 21 mil 500 enfermeras y enfermeros llevar a cabo las visitas domiciliarias para verificar las informaciones y llevar a cabo las consultas preventivas. Las enfermeras podrán prescribir medicamentos.

 

Para llevar a cabo todo este programa de salud pública se tiene previsto una inversión de siete mil millones de pesos, dijo la presidenta Sheinbaum Pardo.

 

El secretario de Salud David Kershenobich Stalnikowitz, expresó la importancia de esta política pública de salud en materia de prevención de los padecimientos que aquejan a las personas mayores al realizarse las visitas casa por casa.

 

El nuevo titular federal de Salud ha señalado que las enfermedades crónico-degenerativas, como diabetes, obesidad, hipertensión arterial y daño renal, entre otras, son responsables de 80 por ciento de la morbilidad y mortalidad; de ahí la importancia de la prevención y la atención primaria.

 

Este Censo plantea crear un sistema de cuidados, además de las consultas domiciliares y atenciones preventivas de las personas de más de 65 años independiente si son o no derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Instituto de Seguridad Social y Servicios de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) o del IMSS -Bienestar.

 

El Director del IMSS, Zoé Robledo Aburto, destacó que las consultas domiciliarias anticiparán las urgencias médicas de las personas mayores con diferentes padecimientos crónicos, auditivos, visuales, de autonomía y evitar saturaciones en las clínicas del instituto que atienden a 2 millones trescientos mil trabajadores, a sus familias, pensionados y estudiantes de la modalidad de atención médica facultativa.

 

En los últimos 5 años, Robledo Aburto informó, al final del sexenio anterior, que el IMSS atendía a 77 millones de derechohabientes. El IMSS tiene en servicio seis mil 519 unidades de medicina familiar, 350 hospitales de segundo nivel 36 hospitales de alta especialidad.

 

El director general del IMSS-Bienestar, Alejandro Svarch Pérez, presente en esta mañanera, subrayó que este servicio extramuros permitirá detectar enfermedades. Svarch Pérez mencionó recientemente que la institución a su cargo tiene la responsabilidad de impactar y transformar la situación de salud de más de 64 millones de mexicanos que no tienen seguridad social.

 

Svarch Pérez explicó que la institución se guiará por cuatro premisas:

 

  • La salud es un bien social.
  • La salud es el derecho que tiene que ser garantizado por el Estado.
  • La gratuidad no es suficiente para garantizar la provisión pública de salud.
  • La salud es un derecho, pero también una obligación.

 

Detalló que para construir un servicio público de salud único y homogéneo para todas y todos los mexicanos se requiere la conjunción de tres modelos: de gestión, financiero y de atención médica a la salud. Este último será el eje rector que guíe la trayectoria para avanzar. “A nivel central y subnacional tenemos que entender que esto es un proceso de transformación y lo tenemos que vivir paso a paso, es un proceso que requiere construcción y enorme visión de hacia dónde vamos”.

 

Subrayó que para avanzar en la consolidación de este proyecto se construirán alianzas clave con actores del sistema de salud, entre ellos, la Secretaría de Salud, Secretarías de Salud estatales y se fortalecerán las 23 coordinaciones federales del IMSS-Bienestar.

 

Inicia el registro de pensiones a mujeres de 60-64 años

 

En la gira reciente de la presidenta Sheinbaum Pardo en Jantetelco, Morelos, la secretaria Ariadna Montiel añadió el próximo lunes 7 de octubre inicia el registro de la Pensión Mujeres Bienestar de 60 a 64 años; y el censo casa por casa del programa para el cuidado de la salud de los derechohabientes de las Pensiones para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores y con Discapacidad.

 

“Las mujeres que trabajaron en el campo, que no tenían un trabajo con seguridad social, hay que reconocérselos. Por ello esta pensión, porque las mujeres han trabajado toda su vida. Por ello esta pensión reconoce ese esfuerzo, ese trabajo, porque gracias a ustedes las familias y toda la nación sale adelante.”

 

Montiel añadió que se cumple el compromiso de apoyar a las mujeres, por lo que, a partir del lunes 7 de octubre y hasta el 30 de noviembre, comienza el registro a la Pensión Mujeres Bienestar de 60 a 64 años que reconoce su vida de trabajo y esfuerzo por sacar adelante a sus familias; el apoyo será de tres mil pesos bimestrales y se entregará a partir de enero de 2025 de manera directa y sin intermediarios, a través de la tarjeta del Banco del Bienestar.

 

Previamente, durante la visita de trabajo por la sierra de Huautla, informó que el registro iniciará en los Módulos de Bienestar con la incorporación de mujeres de 63 y 64 años, y de mujeres de 60 a 64 años que viven en los municipios con mayor población indígena, como un acto de justicia social para los pueblos originarios.